En nuestro programa sobre los Game Awards mencionamos nuestro interés de jugar It Takes Two, ganador a mejor juego del año y otros tantos galardones más.
Y voy a decir, en su momento estaba muy decepcionado de que Psychonauts no hubiera sido el ganador. Pero luego de jugar It Takes Two, debo admitir que entiendo a la perfección por qué resultó ganador. No me malinterpreten, sigo enamorado de Psychonauts y creo que es uno de los mejores juegos que he jugado en la vida, pero It Takes Two se anima a hablar de temáticas que nunca habíamos visto en un videjuego.
Divorcio, problemas de pareja, complejo de abandono y otras cosas aún más desgarradoras, el juego nos lleva del éxtasis al dolor de una escena a otra, invitándonos a una montaña rusa de emociones que no recuerdo haber experimentado en otro título.
Sin más preámbulo, los dejo con el enlace para que vean/escuchen nuestro análisis: