Otro encuentro del Club del Gaming, y esta vez nos tocó la experiencia MMO. Y, la verdad… no la disfruté como esperaba.
Hay una gran gama de razones, pero la principal, y a la conclusión que llegamos en el podcast, fue que fallamos en realmente cumplir la experiencia MMO. O sea, jugar con otras personas y disfrutar de un género que tiene “Multiplayer” en su nombre.
En retrospectiva, lo ideal hubiera sido aprovechar la experiencia de mi amigo Wolf4883, hacer contenido juntos, coordinarnos para jugar en grupo, en fin, la experiencia MMO básica. No creo que volvamos a repetir otro MMO en el Club del Gaming, al menos por un tiempo indefinido.
Si a eso le sumamos que yo no terminé de enamorarme de Lost Ark, nos encontramos con la receta para el desastre. Sostengo de todos modos muchas de las críticas que le hice al juego. Un MMORPG también tiene que ofrecerle al jugador momentos para poder jugar en solitario y disfrutar del juego por cuenta propia.
Pero para qué explicarlo acá, mejor los dejo con el podcast!