A priori, la realidad es que no tenía planeado armar un plan de Producción. Lo cual es irónico y cómico a la vez.
Ya desde el vamos, no le recomiendo a nadie encarar un proyecto sin tener un plan de producción. Básicamente por eso hice una pausa y me puse el sombrero de Game Producer por un ratito.
Es muy, MUY importante contar con un plan que nos vaya marcando el camino y nos sirva de recordatorio acerca de cuál es el paso siguiente a dar.
En mi caso en particular, no es un plan de producción normal porque estoy trabajando solo. Pero lo normal es elegir entre una de dos formas de trabajo:
- Metodología en cascada, en donde básicamente se planifica concatenando tareas.
- Metodología ágil, en donde se trabaja por “sprints” con objetivos de trabajo específicos.
- Método secreto tres: un mix de ambos.
Acabo de hacer un resumen exageradísimo de ambas metodologías, porque no vien al caso hablar largo y tendido de ellas.
Yo particularmente voy a trabajar en cascada porque, al ser 1 man studio, no me quedan muchas opciones. Además, al trabajar solamente los sábados, no tiene mucho sentido armar sprints que no voy a cumplir.
La ventaja de mi grilla de producción es que me permite visualizar cómo voy a ir progresando en mi proyecto.
Baby steps, baby steps. Hoy por hoy vamos a este ritmo pero, ¿quién te dice?, a lo mejor más adelante agregamos más horas de trabajo o más progreso detrás de cámara.